Se acerca La Copa Del Mundo en Qatar 2022. Este tan polémico mundial se llevará a cabo en Qatar, el país más rico del mundo situado en el Golfo Pérsico y vecino incómodo de Los Emiratos Árabes Unidos.
Solo para diferenciar, los Emiratos Árabes son un país soberano constituido como Monarquía Federal y situado en la península de Arabia. Este estado unido está compuesto por 7 gobiernos o Emiratos: Abu Dhabi, Ajmán, Dubái, Fuyaira, Ras Al Jaima y Sharjah.
Siendo Dubái el más conocido y famoso destino. Sin embargo, Qatar, genera casi el doble de Producto Interno Bruto que los 7 hermanos unidos.
Qatar es una monarquía absoluta que ha sido gobernada por la familia Al Thani desde mediados del siglo XIX. Antes del descubrimiento de petróleo en su territorio, el destino era famoso por la recolección de perlas y por su comercio marítimo. De hecho un estadio está construido en forma de caracol gigante, en honor a los antepasados pesqueros.
Desde su descubrimiento en la década de los 1930’s, el petróleo y el gas se han convertido en la piedra fundamental de la economía Qatarí, pues más del 60% de su economía está compuesta por la explotación de estos yacimientos, los cuales han proporcionado al país un crecimiento constante que suele rondar en las dos cifras.
Si bien este sector sigue siendo el más importante, Doha, la capital, ha comprendido como el resto de sus vecinos que debe diversificar su economía e inversiones en un mundo post-petróleo. Solo como dato, desde el 2006 el Club de Futbol Barcelona y un puñado de equipos más portaban en el pecho el logo de Qatar Airways, poniendo en el mapa a la pequeña comunidad pesquera que se ha convertido en un portento.
Cuando tuvimos la oportunidad de viajar al Mundial de Clubes del 2019 a apoyar a los Rayados del Monterrey y vivir su legendario partido contra el Liverpool, Qatar llamaba poderosamente la atención por la rapidez con la que construían estadios, hoteles, centros comerciales y destinos turísticos, con trágicos desenlaces para sus trabajadores por la prioridad en la construcción, más que en la seguridad.
En ese viaje y en 11 días conocimos no solo Qatar, sino también Dubai y Abu Dhabi. Y a diferencia de estos últimos dos, en aquel entonces, Qatar no estaba preparado para un Mundial de Clubes de la FIFA, menos para un Copa del Mundo. Pero el experimento microeconómico les dejó grandes aprendizajes.
Probablemente el más importante es el de la tolerancia. Pues se sabe que un país mayormente musulmán e islámico, tiene ciertas reglas históricas y estrictas, que durante ese Mundial de Clubes del 2019 todos aprendimos a la mala y a prueba y error.
Por ejemplo, el castigo para las mujeres musulmanas por dejarse ver sin velo en público, puede ser de detención, pena de prisión, multa o latigazos. Todo eso por el “delito” de ejercer su derecho a llevar puesto lo que quieran. En Irán, por ejemplo, las mujeres deben usar velo obligatoriamente en espacios públicos.
Aunque para este Diciembre del 2022 Qatar se mostrará un poco más relajado con sus tradiciones, aún quedarán estrictamente prohibidas todas las muestras de afecto en público (imagínate que México le gane a Argentina, ¡¡ Todos en la cárcel !!), las fotos a las mujeres cubiertas completamente en Burkas o los videos están totalmente prohibidos también con pena de cárcel para quien invada la privacidad de los ciudadanos.
Cientos de organizaciones no gubernamentales se han manifestado en contra de la celebración ineludible del Mundial en este pequeño país, debido a su política de cero tolerancia al amor entre los mismos sexos, el consumo del alcohol entre muchas otras.
Lo cierto es que el poderoso Don Dinero ya creo toda una ciudad lejos de los estadios, para albergar a un 10% totalitario y tradicionalista de su población. ¿Será suficiente?
El mundial sin duda es todo un negocio y más para el país anfitrión. La derrama económica que genera es incalculable en términos cualitativos pues sus efectos se pueden sentir años después de concluida la última rodada del balón.
Si en París apagamos la perenne flama en honor a los solados caídos, en Japón detuvimos por primera vez en toda su historia un Tren Bala, en Alemania se vendieron más boletos piratas que nunca, ¿Qué nos espera a los Mexicanos, Ingleses, Argentinos y Brasileños fiesteros en este Mundial? Ojalá que se llegue al 5to partido o que se gane, pero que no llenemos las cárceles Qataríes más allá de su capacidad.
Ojalá nos sepamos comportar en un país con reglas muy claras y estrictas y lo más importante, que ruede bien el balón. El balón no se mancha y que Viva México. ¡¡¡Vaameeees Muchacheesss!!!
