El camino a la alcancía digital

ECONOMÍA

El camino a la alcancía digital. Con el paso del tiempo distintas cosas han ido cambiando, desde la manera en que nos educaron, hasta en la manera en que decidimos como administrar el dinero, llevándonos en este aspecto a buscar maneras más eficientes para manejar todos los recursos que poseemos.

Quien no recuerda las enseñanzas de nuestros padres y abuelos, diciendo “tienes que ahorrar” regalándonos aquellas alcancías en forma de cochinito de algún personaje de nuestro agrado, en la cual se guardaban los domingos que recibíamos por parte de nuestros familiares, y la cual, en muchos casos, rompíamos y gastábamos lo ahorrado en cualquier oportunidad que creíamos era lo mejor para nosotros.

Pero, hoy en día, una alcancía no es suficiente, al menos no para proporcionar una educación financiera a nuestros hijos. Por esta razón es necesario escalar a la era digital junto con ellos, y así poder prepararlos más en el ámbito del dinero para que lleguen a ser unos adultos financieramente responsables. Y para poder lograrlo, actualmente contamos con herramientas financieras como las cuentas de banco para menores de edad que distintas instituciones bancarias (como NAFINSA, AFORES, Azteca, HSBC, Hey banco, entre muchas otras) ofrecen, en las cuales a través de sus aplicaciones móviles nuestros hijos pueden ver sus saldos ahorrados, hecho que nosotros de pequeños no podíamos verificar en la alcancía sin abrirla o romperla.

Pero este simple hecho no es suficiente motivación para que los pequeños guarden dinero, por lo que tenemos que valernos de distintos instrumentos de inversión, algunos que podemos poner directamente a nombre de nuestros hijos en contadas instituciones financieras, y otro que podemos poner a nuestro nombre separados de las propias, para así empezar a enseñarles la importancia de un ahorro e inversión inteligente, haciendo uso total de los beneficios del interés compuesto con incrementos constantes de capital. Y así utilicen sus ahorros para algo más importante que comprar cualquier juguete que esté de moda.

Y aunque no lo creas podrán darte una gran sorpresa al decirte “Mamá/Papá incrementa a mi inversión con el dinero que me dieron mis abuelos”.

Y créeme que esto es posible, porque en mi experiencia en asesoría financiera, he tenido la suerte de conocer a dos menores de 10 años que a su corta edad ya han logrado acumular una cantidad de 5 cifras mucho mayor que cualquier cantidad que pude ahorrar durante mi infancia.

Incentiva a tus hijos no solo a ahorrar, también a invertir, aprovecha esta evolución en el ahorro e inversión, y enseña a los más pequeños a tener un ahorro exponencial.