De pronto se convirtió en algo muy habitual y accesible hablar y generar contenido para redes sociales con la palabra inteligencia artificial (IA), tan común como dar los buenos días. Y es que lo viral y el deseo de pertenecer a un grupo “cool” que se adapta a la modernidad, nos impulsó a acceder a una app para generar nuestra foto en distintas realidades o multiversos con imágenes espectaculares.
Todos parecíamos actores de cine o personajes protagonistas de videjuegos; pero no solo llegó ahí la cosa, poco tiempo después de este efecto, abrimos Facebook o Instagram y apareció una cantidad apabullante de posteos con dinosaurios representando oficios para llevar a multitudes a crear ilustraciones que al igual que los dinosaurios, serán fósiles digitales.
La cosa no terminó ahí, ya encarrerados con la inercia de saber más sobre la IA, los jóvenes siempre fieles a su estilo ya tenían herramientas que presumir y de pronto apareció en boga y en titulares “ChatGPT”. Resulta que nuestra juventud estaba usando dicha aplicación desde noviembre de 2022 para que creara por ellos: tareas, guiones de películas, tesis, reportes, artículos, etc; de una forma muy sencilla. Lo más sorprendente de este “chat” desarrollado por la empresa OpenIA, es que es capaz de darte respuestas muy acertadas, naturales y completas, incluso con una extensión de varios párrafos.
Por el momento este servicio es gratuito y esto nos hace pensar en que es fascinante la tecnología y los avances tan veloces que estamos teniendo en los últimos años, aunque también nos hace cuestionarnos sobre la veracidad y la contraparte de las funciones automatizadas tan al alcance del mundo.
La revolución de IA ya llegó y tendremos que adaptarnos rápido, porque cada día hay más información sobre cómo usar estas nuevas aplicaciones y sitios web para crear en cuestión de minutos: logotipos, ilustraciones, animaciones, videos y lo que se te ocurra; lo que hace unos meses requería un equipo de trabajo con varios profesionales, hoy puede hacerlo uno solo que aplique correctamente estas herramientas y logrará cosas excepcionales.
El mundo lleva experimentando las posibilidades de la inteligencia artificial desde 1950, pero hoy está aquí, ya no es ciencia ficción, ni un capitulo de Black Mirror. Basta con tener un celular o computadora para acceder a muchas herramientas creativas que como en todo, pueden ser usadas tanto como para hacer el bien como para hacer el mal.
