En los meses reciente del 2023 hemos sido testigos de los disturbios que se han llevado a cabo en Francia, manifestaciones y protestas en contra de las reformas a las pensiones de los trabajadores que consideran es una violación a sus derechos respecto a la Seguridad Social, incluidas huelgas en diversos sectores claves para el país como lo son el transporte público y el sistema de limpieza y es que no es para menos si tomamos en cuenta que su sistema de pensiones estaba vigente desde el término de la segunda guerra mundial, pero aunque Francia presumía tener el mejor sistema de pensiones del planeta tenía ya años discutiendo la posibilidad de realizar cambios constitucionales al sistema de pensiones y fue durante la administración de Emmanuel Macron que se decide dar este importante y doloroso cambio, importante por los posibles riesgos políticos que estaría pagando el partido LREM; en francés: La République En Marche!, o a veces llamado simplemente ¡En Marcha! (EM; en francés: ¡En Marche!) siendo también estas iniciales las de su Presidente Emmanuel Macron y doloroso por las implicaciones que conlleva dicha reforma y que obligaría a los trabajadores a extender su retiro.
Los principales cambios se estarían dando en la edad de jubilación que pasaría de 62 a 64 años y la exigencia de extender los años de cotización que con la reforma serán 43 años en lugar de los 42 como se estipulaba anteriormente, para cobrar una pensión completa, sin embargo, en marzo el Senado aprueba el proyecto de reforma pensiones, pasando posteriormente a la cámara baja donde el Presidente Macron sabía que no contaba con todo el respaldo de esta por lo que decidió activar el artículo 49.3 constitucional, el cual le permite eludir el voto en la Asamblea Nacional provocando el rechazo no solo de los legisladores sino también de los ciudadanos franceses, ahora bien que aspectos dieron la pauta para que se decidieran a realizar estos cambios, según datos actuales de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico las pensiones representan el 14% de PIB y de acuerdo con el consejo consultivo de pensiones de Francia determinó que se podría generar un déficit en los siguientes 25 años.
Las pensiones en Francia son pagadas por el gobierno bajo el sistema de reparto similar al sistema mexicano en la derogada ley de 1973 la cual en pocos años estará llegando a su fin al jubilarse el ultimo trabajador bajo este régimen, ahora bien, ¿Qué fenómeno se presenta en Francia que afecta la viabilidad de las pensiones con el paso de los años? El mismo que a todo el planeta, las reducciones en las tasas de natalidad han generado que de forma gradual menos trabajadores se integren al comercio formal lo que traen consigo una disminución de nuevos aportantes que serían en teoría quienes estarían pagando con sus contribuciones las pensiones de los jubilados ya que es así como funciona el sistema de reparto, otro fenómeno global es el interés de las nuevas generaciones por emprender y Francia no se escapa de este, en todo el mundo los jóvenes buscan la forma de obtener ingresos evitando al máximo las relaciones laborales formales ya que prefieren invertir su tiempo en emprendimientos personales que trabajar en una empresa aportando con sus impuestos al sistema de pensiones.
El panorama no es muy alentador para los franceses ya que, al haberse aprobado el nuevo sistema de retiro, solo les queda trabajar y seguir aportando si quieren una pensión completa que sería de 1,500 USD aproximadamente para los más afortunados con independencia de los apoyos extras que puedan recibir del gobierno y los menos afortunados no alcanzarán los 961.08 € por mes por persona importe aplicable al 1 de enero de 2023.
Así pues, no podemos dejar de pensar en nuestro sistema de retiro porque México no canta mal las rancheras.