Además de impartir cursos, conferencias y sesiones de coaching, dedico una parte considerable de mi tiempo a investigar la mente y el comportamiento humano a través de entrevistas con profesionales.
Hoy quiero resumirte las 13 principales razones que he encontrado, por las cuales el equipo puede perder la lealtad y experimentar apatía o desmotivación. ¡Toma nota!
1. Dar órdenes: Si bien es necesario en situaciones urgentes, utilizarlo como un estilo de gestión constante limita la iniciativa de tus colaboradores.
2. No escuchar: Hablar sin permitir que los demás se expresen aumenta el riesgo de cometer errores. Haz preguntas poderosas, esto no te quitará autoridad.
3. Decidir hasta el más mínimo detalle: Además de agotarte, esta práctica disminuye la creatividad de tu equipo.
4. No agradecer su trabajo: Si piensas que “para eso les pagas” nunca recibirás más que lo mínimo.
5. Desconfiar de cada paso del proceso y revisarlo: Esta actitud se percibe y desmotiva a cualquiera. Enfócate en dar lineamientos y asegurarte de que se cumplan.
6. Buscar culpables ante el error: Esto hará que las personas oculten sus equivocaciones, lo cual te saldrá más caro a largo plazo.
7. Cambiar los planes sin avisar: Puede interpretarse como falta de respeto o aprecio por el trabajo de tu equipo. ¡Comunícate, incluso si son malas noticias!
8. Ser ambiguo: La ambigüedad demuestra inseguridad y puede generar confusión o conflictos.
9. Favorecer los chismes: Al escucharlos, los estás promoviendo. Decide ponerles un alto, ya que los rumores pueden afectarte a ti también.
10. Practicar la ley del hielo: Si te molesta algo, quedarte callado, aislarte y mostrar tu enojo con tu lenguaje corporal, solo genera confusión.
11. Comunicar con indirectas: Tus colaboradores no tendrán claridad sobre lo que se espera de ellos y esto afectará los resultados.
12. Explotar, gritar o arrojar cosas: Este comportamiento ya es intolerable. Aprende a manejar tu ira y elige tus batallas.
13. Hacer terrorismo: Como líder, tienes el poder de influir en la dirección, promoción y salario de tu equipo. Si utilizas esto para chantajear o amenazar, las personas se centrarán en buscar otro empleo en lugar de hacer su trabajo.
Si te identificas con alguno de estos puntos, te recomiendo que te acerques con tus colaboradores de confianza y les pidas retroalimentación sobre tu estilo de liderazgo.
El siguiente paso es contratar a un coach o recibir entrenamiento para actualizarte. Además, te invito a seguirme en mis redes sociales, donde comparto contenido valioso todos los días que puede ayudarte en tu desarrollo. Recuerda, la transformación depende de ti.