El Vaticano estará bajo reflectores en los próximos meses debido a dos acontecimientos importantes para el futuro de la Iglesia Católica, promovidos ambos por el papa Francisco en el marco de la reforma emprendida hace diez años.
A finales de septiembre se celebrará el noveno Consistorio de su pontificado. Francisco creará 21 cardenales, ninguno de ellos de México. En octubre se llevará a cabo el Sínodo de la Sinodalidad, con el que Francisco pretende plasmar una Iglesia más democrática y participativa.
Empezamos por el Consistorio. La creación de los nuevos cardenales será mirada con lupa por los observadores vaticanos porque en esta fase del pontificado de Francisco, que cumplirá 87 años en diciembre, aumenta la atención por la composición del Colegio Cardenalicio del que saldrá su sucesor.
Los cardenales electores, es decir, los que tienen menos de 80 años, tienen que ser mínimo 120. A partir del próximo Consistorio los cardenales con derecho a voto serán 137, y los que no tendrán derecho a votar serán 106. Hay que tener en cuenta que entre 2023 y 2024, más de veinte cardenales cumplirán ochenta años y saldrán del Colegio Cardenalicio. En este noveno Consistorio, Francisco creará a cardenales de Italia, España, Polonia, Portugal, Francia, Suiza, Argentina, Venezuela, Colombia, Estados Unidos, Sudáfrica, Sudán del Sur, Tanzania, Malasia y Hong Kong.
El dato interesante es que en sus diez años de pontificado creó los dos tercios de los cardenales electores, y la mitad si se cuenta a los no votantes. De cara a la sucesión, este es un elemento importante porque Francisco ha elegido a hombres afines a su modelo y a su visión de Iglesia.
Quedan tan sólo 29 cardenales creados por Benedicto XVI, y 9 por Juan Pablo II. Los cardenales europeos siguen siendo mayoría, pero en estos diez años el colegio se ha universalizado, y ya son 90 los países, incluso muy pequeños y periféricos, que cuentan con un cardenal. Hasta ahora, hay 53 europeos, de los cuales 15 italianos, 23 de Asía, 19 de África, 16 de Norteamérica, 24 de América Latina y 3 de Oceanía. Cuando él fue elegido en 2013, de 115 electores, 60 eran europeos.
Por lo que se refiere al Sínodo, es decir, la reunión de los obispos de todo el mundo, sobre la Sinodalidad, que se celebrará del 4 al 22 de octubre, los ojos están puestos en la decisión de Francisco de dar voz y voto, por primera vez, a las mujeres, y de tratar algunos temas controvertidos, como de qué manera la Iglesia puede aceptar e incluir a los que no se sienten aceptados por ella, debido a su afectividad o sexualidad, como los divorciados y vueltos a casar, los que conviven o viven en matrimonio poligámico, y las personas LGBTQ, así como la presencia de las mujeres en la Iglesia.
Además, llamará la atención el aumento de los laicos y de los jóvenes. Antes de la celebración del Sínodo de octubre, se llevó a cabo una consulta y escucha a nivel de todas las iglesias locales del mundo.
