Para un productor de contenidos audiovisuales, el ser asignado para cubrir un evento es “de entrada” una satisfacción, ya que es algo que te apasiona y si además es todo el planeta estará al pendiente de un hecho histórico como el Mundial de Qatar 2022.
Una vez conformado el presupuesto y proyecto, comenzaron nuestras pláticas formales con la agencia de viajes porque comprar todo en internet era muy riesgoso, debido a las exigentes normas del país anfitrión: Qatar que ya tenía fama de haber expulsado reporteros desinformados.
Una de las principales reglas para emprender el viaje era antes que nada conseguir un boleto para cualquier partido de futbol oficial durante el mundial, obteniendo dicho boleto podríamos conseguir la ansiada Hayya Card que sería equivalente a una VISA, una vez logrado dicho objetivo, los vuelos y el hotel serían solo un paso más, nunca olvidaré cuando me dijo la agente de viajes: “Ya tienes un pie en Qatar”.
Hacer la noticia oficial incluso a familiares y amigos también tuvo que ser algo estratégico, ya que como dice el dicho: “del plato a la boca se cae la sopa” y más en esta era de redes sociales donde cualquier cosa filtrada está en riesgo. Al mismo tiempo que debíamos ser discretos, teníamos que hacer mucho ruido mediático, puesto que Toño Moreno sería de los pocos periodistas del norte de México que asistirán al mundial, por lo que hacer promoción sin incluso haber viajado a medio oriente sería el primer contenido a producir, la buena suerte es que Coahuila también es desierto y al paraje detrás de mi casa (en Ramos Arizpe) con una buena toma “cerrada” bien podría ser cualquier desierto.
Una de las virtudes de producir contenidos digitales en esta época es que los equipos cada vez son más pequeños y poderosos, por lo que logré conjuntar una isla de edición de vídeo (SIN MONITOR, ese lo conseguiría en el hotel con el televisor que incluía nuestro cuarto) todo en una mochila de trabajo más un maletín de cables, periféricos y discos duros, en el caso de las cámaras, también ahora un celular de alta gama fácil te entrega resoluciones cinematográficas hasta en 8K y transmitir a redes sociales solo dependería del buen o mal internet que tuviéramos.
Al llegar a Doha lo primero que me impactó fue que efectivamente los “rezos” musulmanes sonaban por todos lados (5 veces al día) y otra de mis primeras experiencias era ver a tantos viajeros de tan diversos países llegando con sus camisas de sus selecciones aún mismo lugar sin duda era una fiesta mundial de la cual seríamos parte y que continuaré narrando en la siguiente edición.