En estas fechas es muy común ver parques, gimnasios y agendas de nutriólogos completamente llenos. Para los usuarios constantes de los gyms es hasta molesto ir a hacer ejercicio durante las primeras semanas del año porque todo está ocupado. Sin embargo, saben que esto durará solo unas cuantas semanas hasta regresar a la normalidad. De hecho, se dice que los gimnasios tienen paquetes de año nuevo que incluyen un paseo por los aparatos y la selfie para las redes sociales.
Pero ¿por qué pasa esto?, pues porque nos encanta establecer metas y los inicios de año son perfectos para iniciarlas, sin embargo, también pareciera que nos encanta dejarlas a unas cuantas semanas de haberlas iniciado. De hecho, se dice solo 8 personas de 100 cumplirán sus propósitos al finalizar el año, así que todo esto hace pensar que, estadísticamente hablando, tenemos en contra las probabilidades al iniciar nuestras metas.
Muy seguramente habrás escuchado sobre la definición de metas SMART (inteligentes). Se trata de un acrónimo del inglés a través del cual se explican las características básicas que debe de tener una meta. Se dice que debe de ser Específicas (Specific), Medibles (Measurable), Alcanzables (Achievable), Realistas (Realistic) y de Duración limitada (Time-bound).
Por ejemplo, si quisieras tener más ingresos pasivos, sé específico (quiero ganar $100,000 pesos en ingresos pasivos); utiliza un indicador medible (quiero ganarlo mensualmente); cerciorarte que es alcanzable (tengo ingresos actualmente, sé cómo y dónde generarlos); define su relevancia (mejorar mi salud financiera y mi estabilidad económica); y establece su temporalidad (lo quiero lograr dentro de 6 meses, es decir, en junio).
Por otro lado, también existen las metas DUMB (tontas). Si el objetivo es mejorarse a sí mismo, los objetivos DUMB son la mejor manera de hacerlo. Como sabes, DUMB significa “tonto” en inglés, pero no te dejes engañar por esto, pues esta clase de objetivos están diseñados para sacarte de tu zona de confort y para que seas cada día más creativo al respecto.
Para establecerlos debes, primero que todo, soñar en grande, el chiste de estos objetivos es que no te dejes entumecer por el realismo del paso a paso de otros métodos. Parte de eso es escribir o establecer el objetivo en palabras alegres y motivadoras, poner estos objetivos basados en sueños y no en resolver problemas. En cuanto al método, tus objetivos deben poder ser incluidos dentro de tu rutina, y para hacer esto debes preguntarte ¿qué puedo hacer todos los días que me acerque a mi objetivo? ¿qué puedo hacer cada mes?
Metas DUMB: Realizable (Doable), Entendible (Understandable), Manejable (Manejable), Beneficioso (Beneficial). Rompe el objetivo en pequeñas acciones que puedas hacer con frecuencia. Finalmente, enfócate en cambiar tu comportamiento para lograr tu objetivo, pues, según el método DUMB, modificar y controlar tu comportamiento hará que cumplas tu objetivo más fácil.
Por ejemplo: Objetivo: Bajar 10 kilos. Objetivo DUMB: Verme fabuloso/a para el último día del año. Para hacerlo voy a levantarme a las 5am y haré ejercicio con ayuda de una aplicación o un entrenador, hasta las 6am. No compraré ningún alimento con azúcar en el super. Entonces, los objetivos DUMB te servirán para cumplir esos objetivos tan grandes que se sienten irreales, pero que se vuelven posibles por medio de pequeños pasos.
Y entonces, ¿por dónde podemos comenzar? Aquí te comparto 6 poderosos pasos que según Tony Robbins en su libro “Poder sin Límites” son la mejor manera de lograr nuestras metas:
- Piensa en esa meta que quieras lograr para finales de este año.
- Ahora reflexiona en todo lo que tú no has hecho para lograrla.
- Piensa en todas aquellas cosas, situaciones o personas que te has pedido por no hacerlo. Crea una novela de todo lo malo que pasará si no cumples con esa meta.
- Por otro lado, responde ¿qué cosas buenas te sucederían a ti y a tus seres queridos si logras esa gran meta que quieres alcanzar?
- Entonces cuestiónate ¿qué vas a hacer para que eso que quieres se haga una realidad este fin de año?
- Aquí es donde se logra el milagro. Responde ¿qué te comprometes a hacer a partir de hoy y el resto del año para lograrlo?
Es un hecho que las metas no se logran solas y para realizarlas necesitamos generar buenos hábitos, por lo que Robin Sharma en tu libro “El líder que no tenía título”, menciona que un hábito se logra practicándolo por lo menos 61 días. Así que, si llegas a marzo en el camino hacia alcanzar tu meta, es más probable que la logres.
Yo soy Ciro Rivera y recuerda que cuando cambias la forma de ver las cosas, las cosas cambian de forma. Hasta pronto.
